Fue la Compañía Trasatlántica Española la naviera que podemos catalogar como la más plena, tanto en hechos históricos como por sus buques y sus asiduas rutas, marcando su desaparición el fin de una época, aunque aun mantiene intereses navieros, pero a años luz de sus tiempos de esplendor.
Fue el vínculo por mar, tanto a los países de la América Central, como a los U.S.A , el tráfico de pasajeros y emigrantes fue su principal cometido , y hasta sus últimos años mantenía esta actividad, pasando posteriormente a manejar trafico en contenedores, pero esa es otra historia.
Dos fueron sus últimos buques dedicados al trafico de pasaje, el BEGOÑA y el MONSERRAT, hoy traemos a colación el Begoña, aun recordado en sus escalas en el puerto de Vigo.
Construido inicialmente como un buque de la clase Victory, fue botado en 1945 ya finalizada la guerra, estos buques fueron vendidos a armadores del mundo entero, y la compañía Sitmar Line lo compró, después de una gran transformación para adecuarlo al tráfico de emigrantes, con el nombre de CASTELBIANCO, comenzó en 1952 el transporte de emigrantes a Australia y Sudamerica, teniendo su base en Génova.
En 1957 lo compró la Trasatlántica, bautizándolo como BEGOÑA, con bandera española, tocaba los puertos de Tenerife, Jamaica, Islas de las Antillas, Vigo, Southampton, hasta hace pocos años, aun en el S.V.A había ex tripulantes de los mismos, así permaneció hasta 1974, durante su viaje a las Antillas, su máquina reventó y a remolque del Oceanic, llegó malamente a puerto.
Ya era irrecuperable, y fue vendido para chatarra, el 24 de Diciembre de 1974 llegaba a Castellón, y el desguace fue su siguiente paso.
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