La Standard Oil Company of New Jersey, más conocida como la ESSO, fue una de las navieras americanas que en su propia carne sufrió unas enormes pérdidas a la entrada de la segunda guerra mundial, de los EEUU, su flota estaba abanderada tanto en USA, como en Panamá, pero sus tripulaciones eran de nacionalidad americana en gran parte.
Mantenían el suministro de gasolinas, crudo, etc., desde Venezuela, Aruba, los puertos de Texas, etc., a toda la costa este, los submarinos alemanes hicieron auténticas masacres en los mismos, peligrando en una época el suministro de estos productos, después de establecido el sistema de convoyes, estas pérdidas bajaron, pero su masacre fue enorme.
Amén de suministrar al continente USA, la flota de la ESSO mantenía el suministro de gasolinas, querosenos, fuel, etc., a toda la flota americana del Pacifico, lo que da una idea de la colaboración en el esfuerzo de la guerra de esta compañía.
Después de la guerra, se estableció un programa de construcciones, abanderando en muchos países su flota, aún manteniendo el cuartel general en New Jersey, uno de los clásicos buques de esta flota es el ESSO ESSEN, construido en 1960 en Hamburgo, de 48.535 toneladas de peso muerto era lo que en la época se consideraba ya un barco grande en este transporte. De puente al centro, maquina a popa, amplios pasillos exteriores, hacía la ruta a los países del Golfo Pérsico para Europa, Hamburgo y Rotterdam, en el mismo navegaron tripulantes españoles, que de aquella eran muy solicitados, y las bolsas de embarque de Rotterdam se nutrían de gallegos a miles. Desconozco cuando fue desguazado este barco, pero si que cambió después de la ESSO de nombre, algún armador griego le sacaría aun provecho.
La ESSO, después del desastre del EXXON VALDEZ, vio claro que mantener una flota podía traer enormes consecuencias negativas, tanto económicas como mediáticas, decidiendo seguir en el negocio del petróleo, pero que los barcos los pusiese otro, dedicándose a fletarlos y sacarse preocupaciones.
No hay comentarios:
Publicar un comentario